NUESTRA HISTORIA
“En 2025 Etxelaia comienza una nueva etapa bajo la gestión de Urdaibai Experience & Travel, para continuar siendo una casa de referencia en Urdaibai, estrechando su vínculo con esta tierra y recordando tiempos en los que nuestra historia la contaban aquellos que creían en los mitos y las leyendas.”
La Mitología vasca siempre ha sido una gran fuente de inspiración de cuentos protagonizados por personajes que acompañaban a las gentes de los pueblos y baserris (caseríos) en su día a día. Su modo de vida y la manera de cultivar la tierra, los lazos familiares y la herencia de sus vivencias era controlada por dioses y poderes de la naturaleza a los que les ponían nombres ancestrales.
En Etxelaia, hemos querido rendir homenaje a Mari, Sugaar, Tartalo, Lamia, Eguzki, Ilargi, Sorgin y Galtzagorri, para dar nombre a las estancias en cada uno de los pisos de la casa.
Los primeros registros de esta casa se remontan al año 1830. Un viejo caserío familiar, de nombre Orue Albízuri, fue transformándose en la segunda mitad del siglo XIX en una casa señorial con un aspecto similar al que hoy tiene.
Desde entonces, la casa ha experimentado diferentes reformas para ir adaptándola a las necesidades y usos de los tiempos que le ha tocado vivir.
El año 1900 es un momento importante para la historia de la casa Orúe Albízuri y para las historias que en ella han ido sucediendo. Ese año fue trazada la gran recta que une Gautegiz-Arteaga y Kortezubi; que a pesar de suponer un gran avance en la época, condicionó después el día a día del pueblo, ya que partió en dos una gran cantidad de propiedades del municipio de Arteaga.
Su ubicación a la entrada del pueblo debió resultar interesante desde el punto de vista estratégico durante la Guerra Civil, ya que fue tomada por ambos bandos en distintos momentos de la contienda.
Pasada la guerra la casa continuó siendo lo que siempre fue, una casa familiar que en ocasiones fue utilizada como primera vivienda y en otras como casa de veraneo.
A mitad de los años 50 la casa se cerró, permaneciendo más de veinte años deshabitada, hasta que en el año 1977 se rehabilitó para volver a funcionar como primera vivienda.
En 2011, se planteó la necesidad de darle a la casa una nueva orientación. El objetivo fue rehabilitarla para un uso que hiciera sostenible su mantenimiento.
Tras evaluar diferentes posibilidades, se estimó como opción más conveniente mantener la casa como un establecimiento de alquiler íntegro, adecuando su distribución, actualizando las instalaciones y mejorando la accesibilidad. Todo ello sin perder su estructura en torno a su balconada central, que ejerce de eje integrador del conjunto de la construcción y de la convivencia en la casa. En la fase de interiorismo, se adecuaron las instalaciones a la nueva distribución, manteniendo todos los elementos originales posibles y restaurando el mobiliario de mayor valor. También entonces se reformaron los espacios exteriores, incluida la piscina. El proyecto de reforma y rehabilitación de la vivienda fue acometido entre 2015 y 2017, para comenzar su operación como alojamiento turístico en 2018 bajo el nombre comercial de Etxelaia.
LA CASA Y SU ENTORNO
Un lujo de casa en un entorno rural único. Etxelaia es un proyecto en marcha. Aunque ya estamos en funcionamiento, seguimos viviéndolo como un proyecto porque cada día en esta aventura es una oportunidad, una nueva idea, un camino por descubrir, por inventar y por desarrollar. La casa y su entorno, Urdaibai, llevan casi doscientos años de la mano, pero siguen abriendo nuevas formas de conexión y relación entre sí.
La casa Orue Albízuri, nombre original de Etxelaia, se asienta sobre la estructura de un antiguo caserío, que en 1830 fue reconvertida en casa señorial, y a principios del siglo XX se le dotó de la estética que aún conserva. Después ha experimentado pequeñas ampliaciones y rehabilitaciones, intentando siempre mantener el espíritu de la casa original, con numerosos elementos de entonces, pero adaptándose poco a poco a la evolución de los tiempos.
Con esa filosofía, en 2011, cuando la casa llevaba cerrada tres años, empezamos a gestar la idea que nos ha llevado hasta aquí, recuperar la casa y abrirla al público.
Nos pusimos en marcha con la romántica idea de crear el clima adecuado para que el cliente disfrutara la experiencia tal y cómo lo habíamos hecho nosotros; es decir, vivir la casa en familia y con las personas más cercanas.
Todos sabemos que a menudo el romanticismo pierde fuerza a medida que choca con la realidad, y en este caso las dificultades fueron reales desde el principio. Sin embargo, la ilusión y la firmeza de la idea original han sido el principal valor que nos ha permitido llegar al punto de salida.
PROFESIONALES
En cualquier caso, no hubiera sido posible el desarrollo de Etxelaia sin un punto de suerte, la de encontrar por el camino a excelentes profesionales que, cada uno en su parcela, han hecho suyo el proyecto y han aportado lo mejor de ellos al resultado final.
En este capítulo hay que destacar al estudio de arquitectura SaizVerdoux y a Gakoak Interiores. Ambos se encontraron con un continente y contenido de casi doscientos años, el cuál había que tratar con suma delicadeza.
En SaizVerdoux Arquitectos tuvieron claro desde el principio que estaban ante un proyecto con características muy interesantes y retadoras para ellos: unas preexistencias magníficas, un entorno inmejorable y un encargo dominado por un empuje de recuperación de la memoria familiar.
MANTENER LA ESENCIA DE DOS SIGLOS
Lo que comenzó como una aparente reforma, enseguida se reveló como una verdadera rehabilitación arquitectónica a todos los niveles, teniendo que enfrentarse a la sustitución de la cubierta, la excavación interior del terreno, o la rehabilitación completa de la estructura; todo ello con el objetivo de mantener la esencia de un edificio de dos siglos. La realidad de la casa ya era suficientemente potente y expresiva como para añadir o quitar elementos importantes. Fue en los espacios exteriores, donde se dotó al conjunto de una estética contemporánea, sin dejar de ser por ello compatible con la vivienda.
Para Gakoak Interiores, el reto era igual de motivador, llevar a cabo la gestión integral del proyecto de decoración y amueblamiento una vez que la rehabilitación llegaba a su fin. El desafío era complejo. Un edificio con mucha personalidad y un conjunto de mobiliario antiguo de necesaria conservación, podían ser condicionantes importantes para el proyecto decorativo, pero Gakoak supo potenciar el valor de ambas cosas y combinarlas con elementos actuales, manteniendo la esencia y dotando a la casa de la funcionalidad necesaria para los tiempos actuales. Con un presupuesto ajustado para la magnitud del proyecto, pero mucha libertad para llevarlo a cabo, así como grandes dosis de ilusión, el esfuerzo no resultó baldío.
EDIFICIO CON MUCHA PERSONALIDAD
AÑO CERO
Concluidos los trabajos proyectados de rehabilitación, restauración y decoración, Etxelaia echó a andar oficialmente en verano de 2017, aunque consideramos a 2018 nuestro verdadero año cero. En este punto, a la idea inicial de destinar la casa al alquiler vacacional, vamos sumando otras iniciativas que encajan bien en un escenario como Etxelaia y en un entorno como Urdaibai. Vemos que son muchas cosas las que pueden acontecer aquí, y vemos que en muchas de ellas esta casa aporta un valor diferencial.